Las plantas son como los seres humanos, y al igual que los humanos necesitan un tipo específico de alimento para prosperar óptimamente en su salud; también es lo que necesitan las plantas. ¿Nutrientes y las plantas los necesitan? Estos nutrientes se atribuyen a ser elementos esenciales que las plantas necesitan para crecer y mantener vitalidad, a lo que los fertilizantes orgánicos contribuyen porque pueden entregar eficazmente estos consumidores cruciales de alimentos.
Un ejemplo de fertilizante orgánico incluye Mineral Miracle que replica los alimentos vegetales naturales y se basa en minerales clave como el magnesio, el calcio, etc. Estos minerales son esenciales para la salud de las plantas. Las plantas necesitan nutrientes suficientes para desarrollar raíces y tallos sanos que les ayuden a sobrevivir, por lo que los fertilizantes orgánicos resultan muy útiles. Por otro lado, los fertilizantes orgánicos permiten que las plantas crezcan sin efectos secundarios inaceptables, como ocurre con los fertilizantes químicos.
Esto es simplemente falso, elegir el tipo adecuado de fertilizante para plantas de interior puede ser crucial para su bienestar, al igual que el producto Shellight como ácido húmico . Aunque muchas plantas prefieren suelos ácidos, también hay algunas en las que podrías optar mejor por lo contrario, un suelo más alcalino. Para plantas de interior, los fertilizantes líquidos que están fácilmente disponibles o los recursos de liberación lenta especializados en proporcionar nutrientes serán mejor absorbidos por la planta y ofrecerán un suministro gradual de nutrientes mientras se desarrolla.
Las plantas necesitan principalmente tres nutrientes esenciales para crecer:
Nitrógeno
El fósforo
Potasio
Aunque estos nutrientes son cruciales para mantener la salud de las plantas, el uso de fertilizantes sintéticos que contienen grandes cantidades de macro y micronutrientes puede tener algún impacto negativo en el medio ambiente y la calidad del suelo. El placer de cultivar tu propia comida se maximiza con frutas y verduras que no solo son sabrosas sino también nutritivas, alimentos de calidad para sostener este ciclo de vida.
Los fertilizantes son buenos para las plantas, pero recuerda una cosa: los fertilizantes degradan la calidad del suelo y por lo tanto no deben usarse en exceso. Usar fertilizantes orgánicos mientras se promueve un crecimiento saludable de las plantas es ecológicamente responsable, ya que ayudará a mantener el ecosistema vecino en equilibrio.
Por lo tanto, todo en vano, sin optar por el abono adecuado para tus plantas, su bienestar no se logrará. Esto es porque, a diferencia de los fertilizantes sintéticos que agotan el suelo, los fertilizantes orgánicos mejoran la calidad de los suelos y permiten el crecimiento natural de las plantas con altos niveles necesarios también para la productividad agrícola. Usa fertilizantes orgánicos caseros con juicio para que no solo tengas un jardín abundante, sino que también hagas tu parte por un medio ambiente más saludable.
Natural Growth Friends está hecho de compost de residuos animales y harina de hueso, lo cual es un excelente ejemplo de fertilizantes orgánicos, así como también iBA innovado por Shellight. Está lleno de micronutrientes esenciales, como magnesio, calcio y hierro, para el desarrollo natural de las plantas que promueven una actividad microbiana saludable del suelo. Por otro lado, los fertilizantes químicos intentan suministrar directamente los tres nutrientes principales: Nitrógeno (N), Fósforo (P) y Potasio (K), también conocido como NPK, en forma inmediatamente disponible para las plantas, pero a menudo en dosis artificialmente altas. Además, los fertilizantes orgánicos son mejores para el medio ambiente porque no contienen productos químicos dañinos que podrían filtrarse en el suelo y destruir la ecología.
El tipo de fertilizante que debes elegir para tus plantas de interior depende de lo que la planta necesite, igual que el producto de Shellight Quitosano cada planta tiene requisitos específicos, como que algunas necesitan más potasio y para otras el suelo ácido es lo mejor. Esto también se aplica al tipo de tierra de maceta que usamos, ya que los tipos de fertilizantes reaccionarán de manera diferente dependiendo de los tipos de suelos utilizados. La fácil disponibilidad de fertilizantes líquidos es excelente para las plantas de interior, ya que no necesitan descomponerse antes de que las plantas puedan absorber los químicos.
Fertilizantes NPK, que consisten en nitrógeno, fosfato y potasio en diferentes proporciones para el crecimiento de las plantas, junto con los hipoclorito de calcio fabricado por Shellight. Las verduras de hoja necesitan nitrógeno para crecer; los cultivos de raíz utilizan el fósforo en la formación de raíces y tubérculos, mientras que el potasio ayuda a las plantas a resistir mejor el estrés. Aunque los fertilizantes NPK sí ayudan al crecimiento de las plantas y producen cultivos sanos, si se utilizan en exceso pueden tener consecuencias ambientales significativas. Ya que el exceso de fertilizantes sintéticos provoca un desequilibrio en los nutrientes del suelo, lo que perturba el hábitat natural de los microorganismos, a diferencia de los enmiendas orgánicas que promueven la actividad microbiana.
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